Música en don Quijote.
“…llegó acaso a la venta un castrador de puercos; y, así como llegó, sonó su silbato de cañas cuatro o cinco veces, con lo cual acabó de confirmar don Quijote que estaba en algún famoso castillo, y que le servían con música, y que el abadejo eran truchas; el pan, candeal; y las rameras, damas; y el ventero, castellano del castillo, y con eso daba por bien empleada su determinación y salida.”. Don Quijote Cap II
Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616)
Cada uno la majestad a su modo, pero siempre anunciada con música.